La despedida

También conocida como la octava…

En el Pueblo de Ocotepec se tiene la costumbre de que los muertos no nada mas vienen, comen y se van, sino que están presentes durante nueve días.

Para las ofrendas de los niños o jóvenes, este acto se realiza el día 8 de noviembre.

Quizás este uno de los momentos mas tristes de la celebraciones de día de muertos y es el día nueve de noviembre, en donde la familia -del difunto de la ofrenda nueva- se reúne como a las 6 de la tarde, si no pusieron la ofrenda a medio día, la ponen en este momento, esta vez un poco mas sencilla en donde se acostumbra poner: tlaxcales, agua, chocolate de agua, velas y veladoras encendidas, chayotes hervidos y cosas un poco mas ligeras pero aguantadoras -que no se descomponen rápido-, en esta ocasión ya no se acostumbra poner flores.

Desde antes de las siete de la noche las campanas de la iglesia y de las capillas comienzan a teñir con el sonido triste y fúnebre conocido como dobles. Al mismo tiempo que comienzan a oírse el estruendo de los cohetones. En algunas de las casas en donde se puso ofrenda nueva se hace una pequeña oración, aveces algún valiente familiar dice unas palabras de despedida hacia su familiar o amigo, en algunos raros casos, si se le pidió el favor al rezandero de acompañar también este día entonces se realiza una oración y se entonan también cantos de despedida que incitan a uno a derramar lagrimas… de dolor, de alegría, de tristeza.

Este acto podría identificarse como parte del cierre del ciclo de duelo que los familiares y amigos del ser querido tienen hacia su difunto que se adelanto al otro mundo, pues las celebraciones de poner la ofrenda nueva son parte del desprendimiento -no del olvido- que uno debiera de tener. Superar la pérdida es algo difícil para algunas personas y esta podría llegar a cerrarse hasta el cabo de año o hasta que la memoria lo permita para que los que quedamos con vida podamos seguir viviendo.

A las 7pm se terminan de hacer repiques de dobles en las campanas, se escuchan tronar varios cohetes y las campanas vuelven a tocar de manera normal. Aunque se tendría que quitar la ofrenda, levantar la mesa de las celebraciones en este momento, colocar la foto del difunto en algún lado colgada a la pared y repartir la ofrenda entre los que asistieron, algunas familias acostumbran quitarla hasta el día siguiente.

Algunas frases que se suelen decir o pensar son: adiós, cuídate mucho, salúdame a N, pídele a dios que nos ayude, no te olvides de nosotros, cuídanos, que te vaya bien en tu camino.